"Los muixerangueros en la plaza de Emilio Castelar".
Y "Una de las figuras más complicadas de la muixaranga."
Fotografías de Cabrelles y Barberá Masip. Las Provincias, 17 de marzo de 1934.
La Muixeranga estuvo en las Fallas de Valencia el 16 de marzo de 1934, actuando por la mañana en la entonces plaza de Emilio Castelar y "en los barrios populares", y por la tarde en los poblados marítimos.
Las Provincias presentaba así este evento:
"Esta nota de folk-lore valenciano que hoy admirarán a su sabor los ciudadanos de la capital, procede de Algemesí, donde se ha mantenido siempre con extraordinario vigor junto con la "Dança dels Bastonets i la planxa", y la de "Els tornejants", más frecuentes en nuestros espectáculos populares.
El grupo de la "Muixaranga" consta de treinta hombre, dos niños, dulzainero, tamborilero y maestro de baile. Este último es Francisco Blay, más conocido por "quico el Barber".
Los "Muixarangueros" van vestidos estrafalariamente, pues la danza se llama también "Ball dels locos", y sus ejecutantes llevan un uniforme (?) de locos que se reduce a pantalón y blusa listados y un gorro con orejeras. El maestro suele lucir sombrero de tres picos, por ser el "Pare dels locos". Probablemente esta indumentaria del maestro fue impuesta en el siglo pasado como reminiscencia de la escena del Manicomio en la zarzuela "Jugar con fuego", que obtuvo extraordinario éxito.
El sastre de teatro que serviría la ropa, disfrazó al maestro con el traje del Marqués de Caravaca, y el maestro se encontró muy a gusto con esta distinción.
La "Muixaranga" no es un baile aún cuando todos sus movimientos procuran sujetarse a ritmo.
Comienza la exhibición con un desfile y dispersión en dos filas que dibujan volutas opuestas, a son de dulzaina y tamboril, en forma que resulta cómica por la excesiva seriedad y ritmo que procuran darle sus intérpretes. Este desfile se repite tantas veces como los "muixarangueros" derruyen una pirámide y se preparan para construir otra.
Porque este es el verdadero trabajo de la "Muixaranga": la construcción de pirámides humanas, a manera de los atletas circenses.
Algunas son de bella estructura, todas difíciles y las más elevadas, de verdadera exposición para los ejecutantes.
En Barcelona hay una nota de folk-lore muy similar: los llamados "Xiquets de Valls". Sin que nos ciegue la pasión, puede pronto apreciarse que la "Muixaranga" de Algemesí es de más decidido y bravo empuje.
Es indudable que llamarán la atención allí donde actúen."
(Las Provincias, 16 de marzo de 1934)
Al día siguiente se publicaron estas dos fotografías y se decía en las crónicas:
"Ayer fue el día de la presentación de la Muixaranga de Algemesí, uno de tantos grupos populares que en épocas de fiestas exhiben sus agilidades, su destreza o su habilidad para ciertos pasos de danza. La de Algemesí se distingue por sus trajes extravagantes y el difícil alarde de fuerza y equilibrio en la formación de pirámides humanas. Fueron muy bien recibidos por el público tan originales juegos y llamó extraordinariamente la atención de la gente forastera que siguió aumentando en la ciudad."
"La Muixaranga de Algemesí estuvo por la mañana en el Ayuntamiento, para realizar ante la ciudad su primera exhibición.
Frente al Ayuntamiento realizaron admirablemente variados ejercicios que fueron muy admirados y aplaudidos.
El alcalde les felicitó por el entusiasmo que la población de Algemesí ha puesto en conservar la valiosa tradición valenciana coreográfica.
Luego repitieron sus juegos en varias calles de la ciudad y fueron muy aplaudidos.
Por la tarde estuvieron en las calles del distrito del Puerto y nuevamente cosecharon abundantes aplausos."
(Las Provincias, 17 de marzo de 1934)
Fuente: Las Provincias. Prensa Histórica.
Puede verse también: La Muixeranga de Algemesí en Valencia, 1934